Las leyendas se quedan con el triunfo. 

Foto: Pablo Lozano.

(KSM) Octagón, Atlantis y Titán remaron contra corriente para vencer al Último Guerrero, Terrible y Hechicero, en lo que fue el combate súper estelar de la cartelera de Martes de Arena México. La definición de la batalla fue con las llaves clásicas de las leyendas, como un viaje al pasado. 

En la primera caída el Hechicero con un rodillazo en el rostro liquidaba a Atlantis leyenda, quedando a Merced para el toque de espaldas del Guerrero. 

Para la segunda, Octagón con un medio cangrejo atendía al Terrible y Titán con lanzas y toque de espaldas dejaba fuera de combate al Hechicero. 

El final de la noche llegaba luego que Atlantis atrapaba al Último Guerrero con la quebradora en todo lo alto y Octagón con la jarocha daba cuenta del Terrible. 

El combate semifinal fue un match relámpago estelar, Máscara Dorada y Templario tuvieron un polémico empate, cuando restaban 8 segundos para el final del tiempo, Máscara Dorada se aprestaba para volar desde el esquinero, y de manera inexplicable el réferi Adolfo González le decía que ya se había agotado el tiempo, mientras la cuenta regresiva del anunciador continuaba. 

La Fuerza Tapatía con Esfinge, Fugaz y Star Black derrotaron a los Cancerberos del Infierno con Virus, Cancerbero y Luciferno, con una rana y puente olímpico de Fugaz a Virus y de Stark Black a Luciferno. 

Volcano junto al Pelón Encapuchado y el Audaz se llevaban el triunfo en la tercera lucha sobre Kraneo, Okumura y Pólvora, luego que el Pelón con una cruceta daba cuenta el explosivo Pólvora. 

La segunda batalla fue con la participación de las Amazonas en relevos sencillos, Sanely y Skadi vencieron a las hermanas Hera y Olympia, con la de a caballo de Sanely sobre Olympia y una quebrada de hombro de Skadi para Hera. 

En la primera batalla de la noche los jóvenes Futuro, Histórico y Brillante junior despacharon a los Indestructibles de Cholo, Apocalipsis y Disturbio, luego que Brillante junior rescataba el triunfo tras azotar a Apocalipsis y luego caerle encima con la espalda y dejarlo fuera de combate.