Canelo impone experiencia sobre Munguía.

Fotos: Premier Boxing Championship.

(KSM) Saúl “Canelo” Álvarez retuvo los campeonatos de peso supermedio WBC, WBO, WBA e IBF por decisión unánime 117-110, 116-111 y 115-112 sobre el tijuanense Jaime Munguía, en pelea celebrada la noche de este sábado en la T-Mobile Arena de las Vegas, Estados Unidos. Una pelea donde Saúl hizo gala de su experiencia y una puntería casi perfecta frente a un Jaime que al tener las manos abajo, fue presa fácil para el tapatío.

Los primeros tres asaltos fueron con un Munguía al frente, tratando de establecer su boxeo desde la media y larga distancia, tratando de aprovechar su mayor alcance y estatura, pero sus golpes no lograron poner en apuros al campeón, que lo iba midiendo para luego atacar con mucha precisión.

La pelea dio un giro de 360 grados en el cuarto asalto, cuando Jaime lograba encontrar el rostro de Canelo con fuerza, pero sin hacerle daño, mientras que Álvarez al meterse al terreno corto lo prendía con un opercot de mano izquierda en la barbilla y lo mandaba a la lona, visiblemente lastimado, el retador lograba terminar de pie el round.

A partir de ese momento, Saúl empezaba a tomar las riendas de la pelea, marcando el tiempo y ritmo, forzando el combate en el terreno corto, sacando mucho provecho a un Jaime que después de lanzar golpes, no lograba regresar las manos para poner la guardia, y eso permitía que el contragolpe del campeón hiciera daño una y otra vez.

Para el séptimo asalto la pelea era otra, con Munguía al ataque en todo momento, pero con las manos abajo, mientras que, al contragolpe, Canelo lo atacaba a dos manos, una y otra vez con golpes muy precisos en el rostro, sumando puntos y no dejando dudas en caso de llegar a las tarjetas.

El combate entraba en su recta final y la diferencia se hacía más grande, con Canelo al contragolpe tocando con fuerza el rostro de Jaime, y el retador mostrando valor y empuje, pero con la mayoría de sus golpes que se estrellaban en la guardia del tapatío, quien ya sabía que el triunfo estaba cerca, sin embargo, no renunciaba a la idea de buscar el nocaut.

Los últimos dos asaltos fueron con Saúl haciendo gala de su gran experiencia frente a un retador valiente, pero que ya se notaba muy cansado, y eso lo aprovechaba el campeón para sumar más puntos y llegar a una decisión unánime que terminó siendo un simple trámite.