Problemas mecánicos frenaron a Rubén Pardo.

Foto: EPI Press.

(KSM) La primera fecha de la temporada 2023 de la NASCAR México Series celebrada en Chiapas le dejo un sabor amargo al veterano piloto Rubén Pardo, debido a que la máquina #15 tuvo problemas en el acelerador y eso le impidió ser competitivo, culminando en la parte trasera del pelotón y con mucho trabajo para la siguiente carrera.

“Desafortunadamente tuvimos un problema en el auto desde la vuelta 1, se quedó pegado el acelerador y eso es muy complicado. Nos llevó un rato arreglarlo, pero era demasiado arriesgado, me metí a los pits en varias ocasiones para arreglar el problema. Perdimos varias vueltas, básicamente tomé esto como una práctica, hicimos varios ajustes ya que tampoco tuve tiempo de rodar mucho en las prácticas por otro problema”, explicó el experimentado piloto.

Con esta situación Pardo culminó la carrera en el puesto 26 de la clasificación general y 16 de la categoría NASCAR México.

El esfuerzo colectivo es de lo más rescatable de la carrera, “estoy contento al final de cuentas porque el equipo no se rindió y todos dieron lo mejor de sí en cada momento. Yo la verdad me quedé con la cabeza fría, no me quise meter en problemas. Aunque mejoramos el funcionamiento del acelerador, en la carrera todavía se quedó una cuarta parte pegada, entonces era complicado controlar el auto”.

Con una amplia experiencia en el deporte motor, entiende que “esto es parte de, terminamos con el auto completo y vamos a trabajar para tener un mejor desarrollo en el vehículo e ir para adelante. Como siempre agradezco el apoyo de mis patrocinadores”.

La siguiente fecha de carrera será el fin de semana del 16 de abril con la visita al Súper Óvalo Potosino, que estará estrenando una pista nueva.