Décima edición del Gran Premio Histórico.
Fotos: Estrategia Blue.
(KSM) El Autódromo de los Hermanos Rodríguez de la Ciudad de México albergó la décima edición del Gran Premio Histórico de México, donde los vehículos más elegantes de la historia se dieron cita, para mostrarse en una competencia donde el objetivo era pasarla bien y recordar las diferentes etapas de la historia del deporte motor.
La pasión, los invitados y los autos de lujo no se hicieron esperar, pues desde las primeras horas del día se podían ver desfilar en los alrededores de la Ciudad Deportiva, desde autos icónicos de las marcas hasta modelos únicos en México. Sin duda fue un día lleno de adrenalina y pasión por el deporte motor.
Desde la apertura de puertas pudimos apreciar autos de los distintos clubes ínclitos en este gran evento, entre algunos de los que tuvimos estaban Club Jaguar, Club Porsche, Club Ford.
Definitivamente hubo emoción a lo largo de todo el evento, tanto con sus carreras que nos dejaban ver los grandes motores con los que contaban los autos de esas épocas y, como no podía faltar, la exhibición estática que nos permitía subirnos a los autos y tomar fotografías.
Tuvimos un enorme aforo, pues los autos vintage no eran los únicos que llamaban la atención a los aficionados, sino también los distintos Stands cómo el de Mercedes Benz, Jaguar, entre otros que nos mostraban sus últimos autos de gran equipamiento.
Los autos no fueron el único reflector del día, los reconocimientos que se entregaron en la ceremonia también tuvieron un gran recibimiento, así vimos la entrega del reconocimiento al pionero del automovilismo en México, Don José Abed, además de los distintos reconocimientos a los presidentes de los clubes presentes.
El evento, como cada edición, no decepcionó en ningún sentido, nos llenó de momentos memorables, nostalgia y pasión en cada parte del recinto, sin duda no podemos esperar la siguiente edición que seguramente nos traerá muchas más sorpresas.
